Todos recordaremos la escena de "no son mis látigos lo que más temen". Todos pensamos: ¡Dios! ¡Ese pedazo de negro de dos metros es gay! ¡Es trucha! ¡Sarasa! ¡Tiene más pluma que Shun de Andrómeda!
Esto es realmente lo que yo vi en aquella escena.
Y recordando esta película me viene otra imagen a la cabeza. Es más un sentimiento... ¿cómo explicarlo? Ah, sí.... pena.
Me estoy refiriendo a nuestra selección de fútbol. Qué bien le vendría unos cuantos tipos como los de esta peli, ¿eh? A todos nos da ánimos ver a nuestro jefe gritando "¡Espartaaaa!" A mí, personalmente, me daría muchos ánimos. No sé... unas ganillas extra de ponerle huevos al asunto. ¿No creéis? Claro que eso de que los líderes vayan por delante en una batalla es un tanto utópico.
Esto es lo que me viene a la cabeza...
Mi consejo es el siguiente: no toméis drogas, no aceptéis cosas de extraños y no comáis cosas del suelo.
4 comentarios:
Shun de Andromeda no es sarasa..es gentil y sensible
esos espartanos semidesnudos fornidos, recios, superdepilados y sudorosos despiertan pensamientos gays?
Cielos, no lo hubiera imaginado...
Jajaja yo también pensé lo mismo en esa escena!!! que cachondeo jaja
Además su voz era muuuy afeminada y esos labios que me llevaba...si parecía una mujer calva! xDD
Alee besotes!
Danniela =)
oye! pues a mi me gustaron los espartanos gays con pokita ropa...q? QUÉ??
POR CIERTO POTE...los guerreros espartanos se negarian a jugar en ese equipo... ¬¬
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